lunes, 21 de septiembre de 2015

Desmontando paridas sobre eduación IV: Aclarando algunas cuestiones acerca de los colegios concertados.



 Empieza el curso y con él las preguntas de todos los años: es que no me han cogido el niño en el colegio que quería ¿qué puedo hacer?, ¿son obligatorias las actividades extraescolares?, Etcétera.

Como el 99,9% de estas preguntas me las hacen padres que quieren mandar a sus hijos a colegios concertados, he decidido escribir un post explicando el tema y resolver todas las dudas.

Los colegios concertados son cosa de Felipe González. Durante el franquismo la educación estaba mayoritariamente en manos de los curas, que la gestionaban a su antojo. Había algunos institutos públicos, pero no alcanzaban ni de lejos para escolarizar a toda la población. Con la llegada de la democracia, el Partido Socialista se vio ante la tesitura de asegurar una educación pública y gratuita a todos los españoles. Esto era imposible con la anémica red de colegios institutos públicos que había dejado el régimen franquista. Era una situación complicada porque había que atender las demandas de la sociedad de forma inmediata, pero difícilmente se podían construir los edificios y formar a los profesores necesarios en apenas un par de años. La solución que se le ocurrió a Felipe González fue la de los conciertos, que consistía exactamente en la gestión privada de la educación pública. Se les ofreció a los colegios privados una subvención anual que cubría todos sus gastos a cambio de que ofrecieran un servicio público.

¿Qué quiere decir esto?.

Pues que los colegios concertados funciona exactamente igual que los públicos, con la única salvedad de que allí no trabajan funcionarios.

La educación antes.


Esta se suponía que era una situación temporal hasta que el Estado se dotara de la infraestructura suficiente para una enseñanza cien por cien pública. Pero el caso es que esta situación se ha prolongado durante 30 años y seguimos así.

Una vez dejado claro de dónde vienen los colegios concertados, paso a responder todas las dudas que me plantean.

El precio de los colegios concertados.

Como dije, los colegios concertados son centros públicos de gestión privada. Como tal, es totalmente ilegal que cobren por la enseñanza. Es como si quisiesen cobrar por la sanidad en la Comunidad Valenciana. El hospital de Denia es un centro pionero en esto de la gestión privada de un hospital público. Allí atienden los médicos de la Seguridad Social. Que cobren en un colegio concertado es como si te cobrase ese médico de la Seguridad Social.

Las actividades extraescolares.

Como los colegios concertados no pueden cobrar por la enseñanza, justifican la sustanciosa minuta que le pasan a los padres con las actividades extraescolares. Le pasan una factura de 500,600 1000 € mensuales aduciendo que es un colegio súpermoderno que tiene un montón de actividades extraescolares. Te dan las clases en inglés, en verano puedes mandar a tu hijo al Reino Unido para que aprenda inglés (pagando, claro está) y tiene todo tipo de actividades deportivas.

En este punto, los padres que vais a mandar a vuestros hijos a colegios concertados tenéis que tener claras dos cosas:

En primer lugar, las actividades extraescolares no son obligatorias. Es ilegal que obliguen a tu hijo a hacer todo eso y a pagar por ello. Los colegios concertados son centros públicos de gestión privada. Pueden ofertar actividades de pago a mayores, pero no pueden obligarte a hacerlas. Otra cosa es que, si te niegas, le hagan la vida imposible a tu hijo. Pero, si quieres mandarle un colegio en el que los profesores le hacen la vida imposible porque no paga, ya es cosa tuya.

En segundo lugar, las actividades extraescolares no son exclusivas de los colegios concertados. Os doy datos de primera mano de institutos en los que he trabajado:

- En el IES Terra de Soneira se les ofertó a los alumnos un mes en verano en Canadá para aprender inglés. Todo pagado.

- En el IES Alexandre Bóveda todos los años hay un intercambio con un colegio inglés. Los españoles van allí un mes y los ingleses vienen aquí para aprender el idioma. También todo pagado.

- El IES Alexandre Bóveda y el IES A Paralaia tienen una sección bilingüe. Se les da la mitad de la materia en inglés para que los alumnos acaben sus estudios siendo bilingües

- En el IES A Paralaia, por las tardes, totalmente gratis, hay clases de refuerzo y de recuperación y clases de expresión artística. Este año añadimos cine. Vamos a hacer películas.

- En el colegio Eusebio da Guarda los hijos de mis amigos juegan en la liga de fútbol y tienen entrenamientos. El cole les presta las camisetas. No van con harapos, ni tienen que traerlas de casa.

Estos son algunos ejemplos de primera mano, pero por supuesto son extensibles a todos los institutos y colegios públicos del Estado.

Publicidad para cobrarte.


El transporte y el comedor.

Muchos de los colegios concertados están en las afueras de las ciudades y hay que ir en autobús y hasta comer allí. Estos son otros de los subterfugios que los colegios concertados utilizan para sacarle dinero a los padres. Hace muchos años trabajé en un colegio concertado que cobraba 60.000 pesetas (sí, todavía en pesetas) por el transporte y la comida. Con esos precios uno se imagina que los niños iban en limusina y comían langosta todos los días, pero no era así. Iban en un autobús normal y la comida la hacía un servicio de cable bastante regular. Sólo era una forma de cobrar de forma torticera.

Sea como sea, no pueden cobrar por el autobús y la comida. Si quieres llevarlos en coche y que tus hijos se lleven la comida en un táper, estás en tu derecho. Otra cosa es que, como antes, luego le hagan la vida imposible por ello.



Los malos estudiantes y la atención a la diversidad.

Como todo en la vida, en los colegios hay buenos y malos estudiantes. Para los malos, la ley prevé una serie de mecanismos que palíe estas deficiencias. Además de las clases de refuerzo, agrupamientos y grupos especiales en los primeros cursos de la enseñanza secundaria obligatoria, a los alumnos con más dificultades se les saca del aula en las asignaturas instrumentales y les da clase en un grupo reducido de unos cuatro o cinco chavales. A partir de tercero se hacen grupos especiales, también con pocos alumnos, con un currículo especial. Además, los colegios e institutos tenemos al menos un profesor de psicología terapéutica para atender a los alumnos más retrasados.

Por supuesto, todo esto cuesta mucho dinero porque hay que movilizar muchos profesores y recursos. La mayoría de los colegios concertados, que funcionan como empresas privadas a las que interesa el beneficio a final de año, directamente pasan de todo. Los alumnos con dificultades no son un buen negocio, así que se deshacen de ellos. Al final de curso te recomiendan que te vayas, cuando no te hacen directamente chantaje, diciendo que, si te quedas, repites curso, si te vas, te aprueban (y que nadie me diga que esto no es cierto porque lo he vivido yo como alumno y como profesor). Y así los colegios concertados se ahorran la inversión en programas compensatorios. Y también obtienen unos estupendos resultados en selectividad, que se encargan de publicitar a todo trapo. Normal, ya que por el camino se han encargado de deshacerse de cualquier alumno mínimamente problemático.

Sé que todos los padres pensáis que vuestros hijos son maravillosos, que esto no les va a pasar y que se verán beneficiados con esta política, ya que el nivel de la clase será más alto. Siento deciros que, con demasiada frecuencia, vuestros hijos no son tan maravillosos como pensáis.

Además de los programas compensatorios, los colegios están obligados a coger un número X de discapacitados. Yo he tenido en clase paralíticos cerebrales y este año en el centro hay tres niños con síndrome de asperger. Más dinero que invertir y poco beneficio. Otra vez más los colegios concertados vuelven a hacer trampa y llegan a extremos delirantes como pasó aquí en Coruña, donde matricularon a un niño como discapacitado porque tenía alergia al marisco.




La admisión de los alumnos (lo que más interesa a los padres).

En tanto que centros públicos de gestión privada, los centros concertados están sujetos a las mismas normas de admisión que los públicos. Hay unos baremos. Hasta hace nada la proximidad de la vivienda al centro y los ingresos de los padres eran los factores que más contaban. Sin embargo, los colegios concertados utilizaban el precio de sus actividades extraescolares, comedor y transporte como filtro para las indeseables clases populares. Pero repito que obligar a pagar por todos esos servicios extras que es ilegal. Otra cosa es lo que realmente sucede.

Hace unos años, también en Coruña, llegó un delegado de educación o un inspector jefe (no recuerdo ahora en el cargo) que se propuso que los colegios concertados cumpliesen la ley. Como dije, la mayoría de los colegios concertados están en las afueras, entre otras cosas porque los terrenos son más baratos. Prácticamente ninguno de sus alumnos viven por allí. No teníann en consecuencia, puntos por proximidad del domicilio familiar al centro. Pero por desgracia para los administradores de uno de estos centros más o menos cerca tenían un asentamiento chabolista y un par de varios semimarginales. Y estos si que tenían puntos por proximidad. El inspector jefe o delegado de educación (ya digo que no recuerdo el cargo) razonó y dijo:

- Sí cobráis una subvención como colegio concertado, tenéis que cumplir la ley y aceptar a los gitanos y a los chavales pobres en vuestro colegio. El colegio concertado, que hasta el momento se había servido de la barrera económica, no podía obligar a aquellos niños a pagar transporte y la comida porque podían ir andando en diez minutos y comer en casa. Entonces se comportaron de la manera más miserable. Movilizaron a los padres que hicieron concentraciones diarias bajo el lema "una familia, un colegio" y una bandera de España (nunca entendí que pintaba aquí la bandera de España, como no entiendo por qué la llevan los que se oponen al matrimonio homosexual, pero ese es otro tema). El caso es que aparecía en prensa día sí y día también, todo con medias verdades manipuladas. Al final, los gitanos no fueron al colegio concertado y creo que el inspector jefe o delegado de educación le costó el puesto.

Nunca discutí con ninguno de aquellos padres llenos de razón, pero el argumento que esgrimían en sus intervenciones en la radio era que los hermanos pequeños ya no podían entrar en el colegio y estudiar con sus hermanos mayores porque tenían prioridad los gitanos. Yo era joven y no tenía ganas de líos (entre otras cosas porque trabajaba en otro colegio concertado), pero debí haber llamado la radio y decir que el problema era que los hermanos mayores ya habían entrado de forma fraudulenta en el colegio.

En cualquier caso, esto del baremo para acceder al centro cambia con la nueva ley. Ya no hay puntos por proximidad y puedes pedir que te acepten el niño en cualquier centro, independientemente de dónde vivas. Otra cosa es que lo admitan.

El tema de las compañías.

Una vez alguien me dijo:.

-Es que yo no quiero que mis hijos vayan en clase con gitanos. Además, en los Maristas hará buenos contactos para el futuro.

Esto es cierto más o menos. Ya hemos visto cómo los colegios concertados seleccionan a los alumnos. Y también es cierto que en algunos colegios públicos hay bastante quincallada. Pero no en todos. Ni siquiera en la mayoría. Depende de dónde te toque. Yo estudié en un colegio privado. Puede que hiciese muchos contactos, pero el ambiente y la educación moral que nos daban eran de un clasicismo repugnante.

Que empiecen a cobrar en bachillerato.

A veces, un colegio concertado empieza a cobrar más al acabar la primaria o la secundaria obligatoria porque no tienen concertadas todas las etapas educativas. Eso es cierto y es legal. Lo que hay que ver es cuanto más te cobran. Si hasta cuarto estuviste pagando 600 € por esas actividades "extraescolares", comedor y transporte, y en primero de bachillerato pagas 700 € por lo mismo más la educación que ya no está subvencionada, tú mismo puedes hacer las cuentas.


Y hasta aquí llego. Si alguien me plantea alguna duda más, ampliaré el post.

6 comentarios:

  1. Maravilloso post, y eso que no soy madre, pero sí la tita favorita (o eso me dicen los muy truhanes) de montones de niños.
    Yo estudié en un colegio de monjas concertado y en un instituto público. Los dos estaban bastante masificados (unas 30 personas por clase) y, como los dos estaban en un pueblo, las actividades extraescolares brillaban por su ausencia. Pero había algo en lo que uno de los dos destacaba, y mucho, sobre el otro: el nivel del profesorado. Y los profesores de mi instituto eran mucho mejores.

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  2. Coño, Curro! Nos falta la moraleja final......Aquí que acabar con los conciertos YA!

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    1. Pues sí. Me gustaría acabar con los.conciertos, pero mucho me temo que en el frenesí privatizado que vive el mundo actual es poco probable.

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    2. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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  3. Está bien así. Es interesante y está bien explicado, Curro. La moraleja debe ser capaz de construirla cada cual sobre la base del coonocimiento y la capacidad crítica y analítica.
    Un saludo

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  4. Está bien así. Es interesante y está bien explicado, Curro. La moraleja debe ser capaz de construirla cada cual sobre la base del coonocimiento y la capacidad crítica y analítica.
    Un saludo

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