sábado, 20 de julio de 2024

David Graber: La utopía de las normas



-        Es una colección de tres artículos largos o tres pequeños ensayos, como prefiramos. Y una introducción y un apéndice.

-        Los tres ensayos giran en torno a la idea de que nuestra sociedad está inmersa en un proceso que llama “burocratización total”.

 

Introducción: La Era de Hierro del liberalismo y la era de la burocratización total.

 

 

-        En nuestro mundo actual la burocracia está por todas partes.

-        Cuando habla de burocracia, no se refiere sólo a la estatal. También es burocracia la de las grandes corporaciones, como por ejemplo las compañías de telefonía o las aseguradoras o los bancos.

-        No somos conscientes de cómo la burocracia nos rodea por todas partes.

-        Es un pacto entre el poder político-estatal y las compañías privadas.

-        El estado impone normas para toda la población con el objetivo de que se beneficien las grandes empresas. Es una forma de violencia. Por medio de la burocracia, el capitalismo extrae el capital de los trabajadores pobres y lo redirige hacia los poderosos.

-        Ejemplos:

-        las aseguradoras. Nos obligan a contratar seguros de coche o de hogar.

-        La acreditación de estudios. Con un par de años de aprendiz en una empresa muchos oficios se podrían aprender y desempeñar perfectamente. Pero nos obligan a tener un título académico. Para ello, los estudiantes se tienen que endeudar con un banco para pagar esos estudios.

-        Todo tipo de tasas que te cobra un banco. Es prácticamente obligatorio tener una cuenta en un banco, porque las nóminas, los impuestos… todo pasa por ellos. Sin una cuenta bancaria es imposible vivir.

-        Sin embargo, la población no es consciente de cómo la burocracia nos oprime y de su presencia casi total.  

-        Eso es porque se ha impuesto el lenguaje de la derecha política.

-        A la derecha esta suerte de burocracia la beneficia, pero la oculta.

-        Esta derecha ha conseguido que veamos al burocracia como un ejercicio de tiranía.

-        Pero no siempre fue así.

-        En el pasado, la burocracia no era vista como parte de un sistema político tiránico.

-        Durante el reinado absolutista de Luis XIV, el gobierno tenía solo unos pocos centenares de funcionarios.

-        En el siglo XIX, los regímenes burgueses aumentaron enormemente el número de burócratas.

-        La burocracia era vista como esencial para:

-        Construir una sociedad igualitaria y liberal.

-        Unificar mercados locales en grandes mercados nacionales.

-        Proveer educación y oportunidades iguales para todos.

-        Aplicar las mismas leyes a todos.

-        Hacia 1900, se creía que las empresas debían funcionar como la burocracia estatal.

-        La oficina de correos alemana era admirada por su:

-        Eficiencia.

-        Eficacia.

-        Equidad.

-        Max Weber y Vladimir Lenin veían en la burocracia un modelo a seguir.

-        Estados Unidos, al asumir el liderazgo económico mundial, lo hizo a través de organizaciones burocráticas internacionales como el FMI, Banco Mundial, GATT, y Naciones Unidas.

-        Desde la revolución conservadora de los años 70, la visión burguesa cambió:

-        Los burócratas comenzaron a ser vistos como obstáculos para el mercado, en lugar de facilitadores.

-        La economía "burguesa" ha evolucionado de muchas pequeñas empresas familiares en el siglo XIX a unas pocas megacorporaciones en el siglo XX.

-        En el siglo XIX, los dueños de pequeñas empresas estaban presentes y reinvertían los beneficios.

-        En el siglo XX, los beneficios de las megacorporaciones van a los accionistas, que no están presentes.

-        Las megacorporaciones prefieren repartirse mercados en oligopolios en lugar de competir realmente.

-        Si la gente se diera cuenta de que las corporaciones no invierten, innovan, ni compiten, se propondría nacionalizar sectores como la oficina de correos para evitar dar beneficios a accionistas.

-        Por esto, se denuncia la burocracia como ineficaz y tiránica, una idea apoyada por la "clase gerencial" de las corporaciones.

-        Desde los años 70, esta clase gerencial ha crecido exponencialmente, añadiendo trabajos inútiles a la economía.

-        La lealtad de esta clase ha cambiado de sus trabajadores a los accionistas y poderes financieros, actuando en interés de estos últimos.

-        Graeber describe cómo megacorporaciones y el estado se han fusionado, creando una "burocratización total" para maximizar la extracción de rentas mediante la financiarización de activos como casas, créditos estudiantiles y compras.

-        Este proceso es la preparación para un análisis más profundo: el divorcio entre medios y fines sociales.

-        Los medios son racionales, requiriendo una sociedad burocratizada para maximizar beneficios individuales.

-        Los fines son inciertos y dependen de los valores personales, lo que representa una utopía liberal.

-        Graeber señala que en la mayoría de las sociedades humanas, los medios y fines están interconectados; la forma en que se hace algo refleja la esencia de la persona.

-        La idea de ganar dinero de manera inmoral y luego donarlo a la caridad es vista como absurda.

-        Dividir el mundo en esferas públicas y privadas lleva a que una intente dominar a la otra.

-        Algunos ven la racionalidad del mercado como un valor absoluto, promoviendo una sociedad donde todo debe ser "racional", ya sea en el ámbito público o privado.

-        La renovación de la izquierda debe considerar todas estas razones.

-        Una de las contradicciones de la izquierda es su crítica a la burocracia, aunque sus mayores logros (sanidad y educación universales, estado social) son profundamente burocráticos.

-        El lema "la imaginación al poder" ejemplifica esta contradicción, ya que la imaginación es lo opuesto a la burocracia.

-        La derecha ha aprovechado esta crítica interna para desmantelar muchos de los logros sociales, mientras la izquierda no ha presentado una defensa efectiva.

-        Esta situación persiste, y la izquierda debe encontrar una manera de resolver esta contradicción para avanzar.

 

Zonas muertas de la imaginación: un ensayo sobre la estupidez estructural.

 

-        La violencia es una forma de lograr que otros hagan lo que tú quieres sin necesidad de entenderlos.

-        Una vez que sometes al "otro", la mera amenaza de violencia suele ser suficiente.

-        La amenaza se interioriza hasta parecer lógica y el "otro" racionaliza su situación para no volverse loco.

-        Graeber cita las comedias de Hollywood de los años cincuenta para ilustrar esto.

-        Estas comedias repiten el chiste de que los hombres no entienden a las mujeres, sugiriendo que son especies diferentes.

-        Este chiste persiste, reflejando una supuesta realidad de incomprensión entre los géneros.

-        Sin embargo, al revés, el chiste no funciona: las mujeres parecen entender a los hombres sin problema.

-        La razón es que las mujeres, en una sociedad patriarcal como la de Eisenhower, no tienen más remedio que entender a los hombres.

-        En cambio, los hombres no se esfuerzan por entender a las mujeres debido a la presión sociocultural que les facilita la vida.

-        Esto ocurre en cualquier situación de asimetría de poder: jefes que no conocen a sus subordinados, aristócratas sin empatía por los campesinos, mayorías étnicas que no entienden a las minorías.

-        Los subordinados, campesinos, minorías y nativos desarrollan un profundo conocimiento de sus superiores, explicado como "sabiduría popular" o "instinto".

-        Graeber utiliza Madagascar como ejemplo de relaciones de poder y violencia.

-        En 1895, los franceses tomaron el control y abolieron la esclavitud en Madagascar.

-        A pesar de la misión civilizadora, establecieron un gobierno colonial basado en su fuerza y tecnología superior.

-        Los malgaches concluyeron que, aunque no había esclavitud entre ellos, todos eran ahora esclavos del estado francés.

-        Las familias que antes tenían esclavos ahora proporcionaban la mayoría de los funcionarios de la burocracia colonial.

-        El francés se convirtió en "ny teny baiko", el lenguaje de las órdenes.

-        El poder derivado de la violencia permite no preocuparse por los demás ni hacer "labor interpretativa".

-        Las víctimas de violencia estructural suelen empatizar más con sus opresores que viceversa.

-        Esta empatía, junto con la violencia, sostiene estas relaciones de poder.

-        La burocracia entra en juego para gestionar esta disonancia.

-        La violencia estructural crea ceguera voluntaria, similar a la asociada a procedimientos burocráticos.

-        No es que los procedimientos burocráticos sean estúpidos, sino que gestionan situaciones sociales absurdas fundadas en violencia estructural.

-        La policía es a menudo vista como héroes valientes persiguiendo criminales, una imagen popularizada por la cultura americana.

-        En realidad, la mayoría de los policías realizan tareas mundanas como expedir DNI's o tramitar denuncias.

-        Incluso los policías de la brigada de homicidios pasan el 95% de su tiempo haciendo papeleo.

-        Su trabajo principal es hacer cumplir las regulaciones, más allá del ideal de "servir al público".

-        La cultura popular americana ha creado la imagen heroica de los policías, similar a la del cowboy del pasado.

-        Los cowboys fueron retratados como héroes construyendo una América libre, aunque su realidad era trabajar duramente para los dueños de la industria cárnica.

-        Culturalmente los policías son como cowboys en un entorno burocrático.

-        Esto combate nuestro miedo a que la sociedad burocrática acabe con la heroicidad, el carisma o el romanticismo.

-        Además, esta imagen nos hace olvidar que los policías son principalmente burócratas con pistola.

-        En el debate político, cuando se nos pide "ser realistas", en realidad nos están diciendo "tomen en serio la amenaza sistemática de la violencia".

-        Aunque algunos izquierdistas piensan mucho en la violencia, la izquierda en general no le da la importancia social fundamental que le da la derecha.

-        La izquierda se basa en una "ontología política de la imaginación".

-        Es posible darle poder a la imaginación en lugar de a la violencia.

-        Sin embargo, esto requiere un esfuerzo considerable y sostenido.

 

De coches voladores y el índice en declive de ganancias.

 

-        En el pasado, el futuro en la ficción y los pronósticos solía ser más prometedor que el presente.

-        "Regreso al Futuro II" fue una de las últimas películas que presentó un futuro interesante con coches voladores.

-        Desde entonces, la mayoría de las representaciones del futuro han sido distopías cibernéticas, apocalipsis nucleares, sociedades fascistas basadas en datos, colapsos medioambientales, o futuros de pobreza generalizada.

-        El mensaje es claro: el futuro es desastroso.

-        Durante la Guerra Fría, se necesitaba más que una simple amenaza para mantener a la población tranquila.

-        Mientras el otro lado del Muro ofrecía represión, al menos en teoría, se prometía un mundo mejor con fábricas robóticas y una vida dedicada a las artes y los viajes espaciales.

-        Para contrarrestar esta promesa, era necesario ofrecer algo.

-        La serie original de Star Trek puede verse como una versión idealizada del comunismo, pero en clave americana, con robots realizando el trabajo, el dinero como una reliquia y un estado que se ocupa de todo.

-        Esta promesa de un futuro próspero y tecnológico, como el de Star Trek, no se cumplió.

-        Esta ruptura de la promesa del futuro ha contribuido a la desazón existencial y cultural actual.

-        Aunque no hay coches voladores, se podrían considerar otros avances tecnológicos impresionantes, como las tecnologías de la información y las películas como Star Wars.

-        Sin embargo, las personas de los años 60 esperaban avances más tangibles, como naves espaciales y pistolas láser reales, no solo animaciones por ordenador.

-        Se puede argumentar que esas expectativas eran fantasías infantiles, pero muchas ideas, como naves espaciales y semanas laborales más cortas, aparecían en revistas serias y ciencia ficción dura.

-        La idea de un futuro brillante estaba ampliamente aceptada en el pasado; hoy, esos conceptos son vistas literarias, no realidades esperadas.

-        Julio Verne, aunque soñador, vio realizados muchos de sus conceptos en menos de 80 años.

-        El progreso tecnológico real también depende de las prioridades de investigación.

-        A mediados de los 70, con la URSS en declive, se redirigieron los fondos de la carrera espacial hacia tecnologías de la información, que facilitan el control social y la burocratización.

-        Estas tecnologías crean simulaciones más reales que la realidad misma, configurando una sociedad de simulaciones y "posmodernismo".

-        Aunque los avances tecnológicos actuales, como las zapatillas deportivas, pueden ser más sofisticados que los del Programa Apolo, siguen siendo fabricados en condiciones de explotación en países como México e Indonesia.

-        Bajo el glamour posmodernista, persisten las viejas realidades de explotación y desigualdad.

-        No ha habido grandes avances a pesar de las inversiones en ciencia y tecnología.

-        Puede que estemos en una meseta tecnológica; por ejemplo, aunque el Pentágono gasta grandes sumas, los drones siguen sin tener rayos láser y el AK47 sigue siendo el arma preferida.

-        Graeber admite que esta es una objeción válida, pero responde con el problema de la burocratización en ciencia e I+D.

-        Los investigadores están tan abrumados por papeleo y requisitos administrativos que apenas tienen tiempo para la creatividad e innovación.

-        Graeber usa su propia experiencia como ejemplo: su universidad le exige rendir cuentas para tareas administrativas pero no ofrece una opción para "escribir un libro".

-        A pesar de la proliferación de estudios sobre “imaginación” y “creatividad”, el entorno académico es cada vez más hostil a estas cualidades.

-        Históricamente, la imaginación y creatividad eran el dominio de individuos excéntricos y brillantes que no se ajustaban a estructuras burocráticas.

-        En el siglo XIX, en Gran Bretaña, se les dio roles como vicarios anglicanos, con tiempo y soledad para sus investigaciones.

-        En la primera mitad del siglo XX, los profesores universitarios tenían más libertad para explorar ideas.

-        Hoy en día, esas oportunidades han desaparecido.

-        Graeber regresa a las ideas de Marx y Engels, quienes en 1870 en Londres observaban cómo el capitalismo impulsaba continuamente la tecnología y la producción industrial, anticipando que eventualmente socavaría su propia base.

-        Se pregunta si Marx y Engels podrían haber tenido razón y si los capitalistas empezaron a darse cuenta de esto en los años 60.

-        Marx argumentaba que el valor y beneficio solo podían extraerse del trabajo humano, y que la competición impulsaba a mecanizar la producción y reducir salarios, lo que a corto plazo beneficiaba a empresas individuales pero a largo plazo disminuía las tasas de beneficio globales.

-        Aunque la mecanización se esperaba que destruyera el capitalismo, la falta de inversión en fábricas robóticas y el traslado de fábricas a China o al Sur Global podrían tener sentido si la competición no es tan central para el capitalismo como se asumía.

-        La objeción común es que el fracaso de la URSS demuestra que la economía planificada no funciona. Sin embargo, en las décadas de 1940 y 1950, la URSS logró importantes éxitos como derrotar a los nazis, lanzar al Sputnik y al cosmonauta Gagarin, y alcanzar crecimientos económicos significativos.

-        A pesar de la propaganda del libre mercado, el poder americano se basa en una planificación estatal extensa, incluyendo gasto público en investigación, empresas públicas, y sanidad pública.

-        Graeber resalta que, a pesar de las críticas, la URSS también tuvo “tecnologías poéticas” con el objetivo de mejorar el mundo, como el programa espacial y la lucha contra el hambre global.

-        Hoy en día, se tiende a sobrestimar la importancia de la tecnología en la dirección de la sociedad, cuando en realidad la sociedad puede impulsar ciertos desarrollos tecnológicos.

-        Tras lograr la superioridad militar, Estados Unidos ha enfocado sus esfuerzos en controlar a los disidentes y mantener a la población en estado de calma, mientras seguimos esperando avances en curas para enfermedades comunes.

-        ncluso los defensores del capitalismo, al ver la situación actual, están cambiando su discurso de que es un buen sistema a que es el único posible para una sociedad tecnológicamente avanzada.

-        Afirman que el progreso tecnológico ha restringido nuestras opciones sociales, lo cual contradice la idea de que la tecnología podría abrir nuevas posibilidades.

-        Graeber cuestiona si esto también se aplica a tecnologías futuras y si un avance revolucionario podría cambiar la situación.

-        Destaca una contradicción en el neoliberalismo: se presenta como si no hubiera alternativas, pero al mismo tiempo no puede afirmar que el desarrollo tecnológico haya llegado a su fin.

-        El resultado son “avances” superficiales, como nuevos modelos de iPhone cada seis meses, que no llevan a un cambio real a menos que se haga una transformación fundamental.

 

La utopía de las normas, o por qué en realidad, después de todo, amamos la burocracia.

 

-        Primero, necesitamos definir qué entendemos por racionalidad. Históricamente, la razón se ha visto como un medio para controlar nuestros instintos más primitivos, en contraste con lo “salvaje”, que incluye la creatividad y el juego.

-        Los pensadores tradicionales ilustrados han considerado la imaginación como algo a dominar. Sin embargo, en los últimos siglos, con el surgimiento de las burocracias, la razón ha pasado de ser un objetivo en sí misma a convertirse en una herramienta. La razón no dicta nuestros deseos, sino que nos muestra cómo alcanzarlos.

-        La dificultad para definir racionalidad surge porque todavía convivimos con estas dos visiones. Aunque a menudo decimos que la racionalidad nos distingue de los animales, Graeber sugiere que, si entendemos la racionalidad como la capacidad para evaluar la realidad y resolver problemas, los animales también son racionales. En realidad, la imaginación podría ser la verdadera facultad que nos diferencia.

-        La creciente burocratización ha provocado una reacción en la cultura popular, que ha creado mundos de fantasía que contrastan con la frialdad del aparato estatal actual.

-        Autores como Tolkien crean universos que se oponen a la burocracia, donde todo se basa en relaciones personales y existen criaturas que desafían la uniformidad burocrática, llenos de magia y tradiciones. Las búsquedas heroicas en estos mundos, con llaves mágicas y acertijos, a veces parodian los trámites burocráticos.

-        En estos mundos, el sistema político suele ser una monarquía benévola cuya legitimidad depende del carisma del líder, como Aragorn, y se corrompe sin renovación constante, lo que perpetúa una guerra continua. En contraste, los antagonistas, como en Mordor, están caracterizados por la industrialización y la burocracia, representando el mal absoluto en oposición al bien, con ambos en conflicto total.

-        La narrativa medieval que a menudo leemos en la fantasía moderna, como en las obras de Tolkien, está proyectada de forma equivocada sobre la verdadera Edad Media. En realidad, la Edad Media no conocía las “guerras absolutas”; las batallas eran vistas por los nobles como “juegos de honor”, donde el objetivo era capturar prisioneros para pedir rescate, no destruir al enemigo. Los teólogos cristianos de la época diseñaban un Cielo con una jerarquía de ángeles que Graeber ve como una versión ampliada de la burocracia romana tardía. Los pequeños reinos europeos aspiraban a estar inmersos en una jerarquía cuasi-burocrática que diera sentido al cosmos.

-        Graeber aplica un análisis similar a las “sociedades heroicas” de la antigüedad, que existían en los márgenes de los grandes imperios burocratizados y en simbiosis con ellos, pero actuaban como su opuesto. Los imperios tenían escritura, mientras que los “bárbaros” se mantenían fieles a la tradición oral; los imperios construían ciudades, los bárbaros vivían dispersos en la naturaleza; los imperios acumulaban riquezas, los bárbaros las distribuían o destruían para mostrar su grandeza; y en lugar de la burocracia, los bárbaros solían organizarse en torno a la competencia entre líderes carismáticos. Era una lucha entre orden burocrático y desbordante imaginación.

-        La Guerra de Troya es un ejemplo de cómo las sociedades heroicas, productoras de historias, contrastan con las burocráticas que preferían evadirse con relatos de tierras bárbaras en lugar de enfocarse en sus sistemas legales. La literatura sobre las tierras bárbaras servía para proponer una escapatoria al mundo actual, aunque al final reafirmaba la superioridad del sistema burocrático.

-        El sistema burocrático se legitima a través del estado y su soberano, creando una contradicción en su núcleo. La burocracia se supone imparcial y regida por reglas, pero el soberano, por definición, debe estar por encima de las reglas para poder establecerlas. En el pasado, la legalidad y la moralidad provenían de Dios. Las revoluciones americana, inglesa y francesa reemplazaron a Dios con “el pueblo”. La gente creó nuevas leyes al romper las anteriores con revoluciones violentas e ilegales, mostrando que no hay diferencia esencial entre las acciones de un activista de BLM y las de George Washington.

-        Problema del poder constituyente: Tanto para la izquierda radical como para la derecha autoritaria, el problema del poder constituyente sigue siendo relevante, pero cada uno aborda la cuestión de la violencia de forma opuesta.

-        Izquierda radical: Tras los fracasos del siglo XX, la izquierda ha abandonado su glorificación de la violencia revolucionaria. Hoy en día, prefiere métodos no violentos de resistencia. La idea es que quienes actúan en nombre de algo más alto que la ley pueden hacerlo precisamente porque no se comportan como una turba descontrolada.

-        Derecha autoritaria: Desde el surgimiento del fascismo en los años 20, la derecha ve la violencia revolucionaria como una forma de violencia criminal sin distinción. Para la derecha, la violencia es simplemente violencia. Aún así, reconocen que cualquier muestra exitosa de violencia constituye una forma de poder constituyente. Las organizaciones criminales, por ejemplo, desarrollan sus propias reglas para controlar la violencia que de otro modo sería aleatoria. Desde esta perspectiva, la ley es solo una forma de regular la violencia que ella misma originó.

-        Afinidad entre criminales y estado: La similitud entre criminales, pandilleros, movimientos de extrema derecha y las fuerzas estatales armadas se basa en la creación de reglas a partir de la fuerza. Esta conexión revela afinidades políticas: Mussolini, por ejemplo, reprimió a la mafia, pero los mafiosos italianos aún veneran su figura.

-        Imaginación en la política:

-        Izquierda: La imaginación y la creatividad son vistas como fuentes de valor y cambio positivo. La izquierda celebra la capacidad de crear nuevas ideas y estructuras sociales.

-        Derecha: La imaginación es considerada peligrosa y destructiva. Los conservadores buscan evitar los peligros de la imaginación desbordante, mientras que los fascistas buscan liberarla para sus propios fines destructivos, como lo hizo Hitler, que veía el arte como una herramienta para transformar la humanidad a través de la violencia.

-         Durante el siglo XIX, EE.UU. fue un laboratorio social progresista y estableció una oficina federal de correos que empleaba al 70% de los funcionarios federales. La oficina era tan admirada que el término “postalización” se usaba para describir intervenciones públicas exitosas en servicios.

-         Con el tiempo, el término “postalización” desapareció, siendo reemplazado por “going postal” debido a una serie de tiroteos en los años 80 protagonizados por empleados de oficinas de correos. Este término se usa ahora para describir tiroteos causados por enajenación mental, especialmente en el ámbito laboral.

-        Graeber señala que los reportajes sobre estos tiroteos en los medios de comunicación tienen un estilo y lenguaje similar a los reportajes del siglo XIX sobre revueltas de esclavos. Aunque las revueltas grandes eran raras, los informes solían destacar la malicia inexplicable o la locura individual sin abordar causas estructurales, como la esclavitud o las reformas económicas de los 70-80 que afectaron la seguridad laboral.

-        Mientras la oficina de correos enfrentaba recortes, surgió Internet, que, al igual que los correos en el pasado, nació en un contexto militar y transformó la vida diaria con su rapidez. Internet, al igual que la Deutsche Post hace 120 años, despertó un entusiasmo universal. Ambos casos muestran que la burocracia puede ser apreciada cuando se vuelve tan eficiente y confiable que ni siquiera notamos su presencia. En otras palabras, cuando realmente nos libera.

 

De Batman y el problema del poder constituyente.

 

-        El 1 de octubre de 2011, el NYPD arrestó a 700 activistas de Occupy Wall Street por intentar marchar sobre el puente de Brooklyn. El alcalde Bloomberg justificó la acción alegando bloqueo del tránsito.

-        Dos semanas después, Bloomberg cerró el puente de Queensboro durante dos días para filmar El Caballero Oscuro: la leyenda renace. Muchos criticaron la ironía de esta decisión, dado que la película era vista como una pieza de propaganda contra Occupy.

-        Activistas arrestados en octubre, al ver la película, la consideraron hostil pero la tomaron con humor, buscando reírse del retrato que hacían de su movimiento, similar a cómo algunos ven películas que critican ciertos grupos.

-        La película es mala debido a su intento de abordar temas relevantes, lo que resultó en incoherencia. A pesar de que las primeras entregas de la trilogía de Nolan fueron elogiadas por su profundidad, esta última entrega fue vista como un fracaso en términos de mensaje y ejecución.

-        Cuestiona el auge de las películas de superhéroes, comparándolo con la sustitución de películas de vaqueros por películas policiales en los años 70. La pregunta es por qué estos personajes ahora tienen una vida interior compleja y orientación política explícita.

-        A lo largo del tiempo, personajes como James Bond y Spiderman han mostrado cambios en su orientación política, reflejando el contexto de sus épocas. Los superhéroes muestran una tendencia a reflejar sus orígenes históricos y, a menudo, sus mensajes políticos son evidentes.

-        Los héroes de cómics suelen ser reactivos y carecen de proyectos creativos propios, en contraste con los villanos que son innovadores y llenos de planes. Esto crea una dinámica donde los villanos parecen más creativos y los héroes son más rígidos y reaccionarios.

-        Aunque los cómics de superhéroes pueden parecer inofensivos, su mensaje subyacente sobre la necesidad de controlar el caos tiene implicaciones conservadoras. La cultura pop, incluso en su entretenimiento, a menudo transmite mensajes sobre la naturaleza humana y la política.

-        Al igual que las películas de terror que representan la transgresión y el castigo, los cómics de superhéroes pueden tener una función similar, sugiriendo que el caos debe ser controlado, y reflejan una política conservadora en la forma en que presentan la lucha entre el orden y el desorden.

-        Los héroes con traje luchan en nombre de la ley, aunque a menudo operan fuera del marco legal. En el Estado moderno, la ley misma presenta un dilema: ningún sistema puede crear sus propias leyes sin estar por encima de ellas. Tradicionalmente, la ley provenía de Dios o del poder divino de los reyes. La revolución inglesa, francesa y americana introdujo la idea de soberanía popular, trasladando el poder de los reyes al pueblo, lo que planteó un problema: el pueblo, siendo un grupo sujeto a leyes, no puede crear esas leyes por sí mismo sin una ruptura con el marco legal existente.

-        Las revoluciones son actos ilegales que establecen nuevas leyes a través de la violencia. Esto genera una contradicción en la idea de un gobierno moderno que asume el monopolio legítimo de la violencia. La policía puede usar la violencia porque es para hacer cumplir la ley; la ley es legítima porque proviene de la constitución; la constitución es legítima porque viene del pueblo; y el pueblo creó las leyes mediante actos de violencia ilegal.

-        La respuesta mayoritaria es que la época de revoluciones violentas ha pasado y ahora se pueden cambiar las leyes por medios legales, aunque esto significa que las estructuras fundamentales no cambian. En EE.UU., esto ha llevado a una situación en la que el sistema legal se basa en un consentimiento antiquísimo, y se han mantenido estructuras arcaicas.

-        La izquierda radical, afectada por los desastres del siglo XX, se ha alejado de la violencia revolucionaria, optando por resistencia no violenta. La derecha autoritaria, desde el fascismo de los años 20, considera que la violencia revolucionaria y criminal es simplemente violencia. Según la derecha, toda aplicación exitosa de violencia es una forma de poder constituyente.

-        La admiración por el "gran criminal" se debe a que crean su propia ley para controlar la violencia. Los criminales, bandas y el Estado comparten un lenguaje de fuerza y reglas basadas en la violencia. Esto explica la afinidad entre movimientos de derecha y fuerzas del Estado.

-        En el universo de los superhéroes, el espacio es inherentemente fascista, habitado por gánsteres, aspirantes a dictador y policías con roles ambiguos. Los superhéroes y villanos operan en un entorno donde la ley parece surgir de la violencia. Los superhéroes defienden un orden que parece surgir de la nada, resistiéndose a la lógica de los villanos que buscan imponer un nuevo orden mundial.

-        Los superhéroes no buscan conquistar el mundo; su existencia depende de los villanos y del caos que generan. Defienden un orden legal que, aunque defectuoso, es preferible a la alternativa caótica que los villanos representan. No son fascistas, sino defensores de un sistema en el que el fascismo es la única alternativa visible.

-        Entretenimiento y Política: La aparición de los superhéroes en EE.UU. a mediados del siglo XX, durante el auge del fascismo en Europa, no es una simple fantasía paralela, sino una respuesta al dilema histórico sobre el fundamento del orden social tras la desaparición de la revolución. Este dilema también afecta la imaginación política.

-        Los superhéroes están dirigidos a chicos adolescentes y preadolescentes, en un momento de sus vidas en que son imaginativos y rebeldes, pero están siendo preparados para asumir roles de autoridad. Los cómics enseñan que la imaginación y la rebelión conducen a la violencia, que la violencia es divertida, pero que debe ser contenida para evitar el caos.

-        Para la izquierda, la imaginación es valiosa y creativa, mientras que para la derecha es peligrosa y destructiva. El freudianismo popular de la época ve la imaginación como un impulso amoral que puede llevar a la destrucción. La diferencia entre conservadores y fascistas radica en que los primeros quieren proteger contra la violencia de la imaginación, mientras que los segundos buscan desencadenarla.

-        Los cómics clásicos eran ostensiblemente políticos y psicológicos, reflejando temores sobre la imaginación rebelde. En los años 60, el mensaje se volvió más inocuo y orientado al consumo, lo que permitió una aceptación más amplia de los superhéroes. En contraste, las películas modernas de superhéroes, como las de Nolan, exploran temas más psicológicos y personales, con un enfoque en el conflicto interno y la locura del héroe.

-        Las películas como Batman Begins y The Dark Knight profundizan en la psicopatía de los héroes, especialmente Batman, cuyo trastorno mental y obsesiones definen su papel. Los villanos, como Ra’s al Ghul y el Joker, representan anarquistas que creen en la corrupción inherente de la humanidad, reflejando una visión crítica de la política y la naturaleza humana.

-        Las películas revelan que la política es un arte de manipulación de imágenes respaldado por la violencia, como se ve en el plan final de The Dark Knight. La política, según la película, es una ficción que puede volverse contra sí misma, pero esta visión simplista ignora la complejidad de la política real, que no se reduce únicamente a la manipulación de imágenes y violencia.

-        The Dark Knight Rises se enfrenta a una contradicción fundamental: mientras que el mundo real está experimentando una serie de movimientos populares y revolucionarios, la película retrata una visión muy limitada y en muchos casos incoherente de la revolución. La trama se enfoca más en el drama psicológico de Bruce Wayne/Batman que en una representación seria de los movimientos sociales reales.

-        El personaje de Bane es presentado como una figura revolucionaria, pero su motivación y sus acciones parecen ser contradictorias. Aunque empieza como un líder carismático que incita a una revuelta contra la élite, su plan final para destruir Gotham con una bomba nuclear parece desmentir cualquier tipo de coherencia revolucionaria, haciendo que su personaje se vuelva un cliché de la violencia nihilista.

-        La película parece presentar un mensaje en el que la compasión por los menos afortunados (como la que Bane pretende representar) lleva inevitablemente a la violencia. Este enfoque es presentado como una advertencia contra la ideología revolucionaria, mostrando que cualquier intento de cambiar el sistema es inherentemente destructivo.

-        En contraste con la realidad de los movimientos sociales como Occupy Wall Street, que buscaban una mayor equidad y justicia social sin recurrir a la violencia, la película de Nolan se muestra desconectada. En lugar de presentar una crítica matizada a los problemas estructurales, el filme parece limitarse a un retrato superficial donde los intentos de revolución son descartados como actos de violencia sin sentido.

-        Durante su lanzamiento, The Dark Knight Rises fue interpretada por algunos como una metáfora de la guerra contra el terrorismo, planteando preguntas sobre los límites éticos en la lucha contra el mal. Sin embargo, con la aparición de movimientos populares genuinos y cambios sociales, la película parece quedarse atrás, atrapada en un universo ficticio que no puede integrar la complejidad de la realidad.

-        La resolución de la trilogía de Nolan ofrece una visión conservadora en la que el sistema corrupto sigue intacto, pero el héroe y las figuras de autoridad son restauradas, lo que deja una sensación de que el status quo es la única opción viable. La inclusión de un potencial heredero como Robin parece más un guiño a los fanáticos que una verdadera evolución en la narrativa.